Artículo analiza las nuevas tecnologías en motores eléctricos que buscan reducir la dependencia de materiales críticos y mejorar la eficiencia energética | IEEE Spectrum
La transición hacia la movilidad eléctrica exige motores que utilizan imanes con tierras raras, cuya extracción es ambientalmente costosa y concentrada principalmente en China, lo que genera desafíos ambientales y estratégicos. Ante esta dependencia, empresas como Tesla, General Motors y Stellantis están desarrollando motores con menor o nula necesidad de estos materiales. Paralelamente, en EE. UU., Europa y Asia, se investigan sistemas sin imanes permanentes, aunque estas soluciones pueden reducir el rendimiento. La tendencia de almacenamiento de energía impulsa el desarrollo de nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia energética, promoviendo un futuro menos dependiente de recursos críticos.